Plásticos para invernaderos: los mejores aliados de los cultivos durante el mal tiempo
Los plásticos térmicos deben contar con un grosor y una estructura determinada, sepa cuáles
La principal función de los plásticos térmicos para invernadero es proteger los cultivos del efecto causado por las inclemencias del tiempo. Y no solo en invierno. Las heladas que se producen en muchos puntos durante la primavera pueden echar a perder los cultivos, por lo que el uso de plásticos térmicos está cada vez más extendido.
Existen diferentes modelos de plásticos de invernadero. Debido al amplio rango de valores numéricos en el que se mueven, entendemos que resulta más útil ofrecer un listado con las propiedades que se le deberían exigir a este tipo de plásticos.
Características de los plásticos térmicos
• Con respecto al material utilizado en su fabricación, puede estar hecho de EVA (copolímero etileno vinil acetato), PVC (policloruro de vinilo) o PC (policarbonato). No obstante, el mejor material en relación calidad-precio, así como el más utilizado, es el polietileno de baja densidad.
• El grosor más extendido en el mercado es el de 200 micras o 800 galgas, fabricado con tecnología tricapa.
• Un requisito fundamental que se le debe exigir a todo plástico para invernadero es que haya sido previamente estabilizado para que proteja de la radiación ultravioleta.
• La duración mínima recomendada que debe reflejar el producto en la información relativa a sus características es de tres a cuatro años.
• El color blanco traslúcido es el que mejor dejará pasar la luz. Asimismo, para evitar sombras en el invernadero, es aconsejable que la difusión de la luz sea elevada, de al menos el 60%.
• Para luchar contra el enfriamiento nocturno es muy importante que el plástico haya sido dotado de un efecto termo-aislante de al menos el 14%, con aditivos conservantes del calor, para así poder crear un microclima en su interior con el consiguiente aumento de la temperatura.
• El producto tiene que estar provisto de una gran resistencia mecánica y al envejecimiento, para poder cumplir con su cometido en las mejores condiciones.
La vida útil del plástico es un factor muy a tener en cuenta. Para poder alargarla al máximo resulta fundamental dispensarle un trato adecuado, por una parte, en su almacenaje y, por otra, en el mantenimiento.
Consejos de almacenaje de los plásticos de invernadero
• Las bobinas deben estar guardadas en una superficie lisa, elevada y cubierta, como un palé.
• Proteger el plástico de la luz para que no se desgaste antes de tiempo. Cubrirlo con un film negro puede ser una buena solución.
• Almacenar el plástico para invernaderos en un lugar exento de humedad.
• Alejarlo de productos químicos susceptibles de desprender sustancias tóxicas.
Plásticos para invernaderos – ¿Cómo alargar su vida útil?
• Con el fin de evitar cualquier sorpresa desagradable y para comprobar que todo está en las condiciones adecuadas, conviene revisar periódicamente el invernadero.
• En el caso de que se produzca una rotura accidental, la forma de solucionarlo es mediante la unión de las piezas con cinta especial de reparación de invernaderos. La reparación debe realizarse en cuanto te percates de la rotura.
• Después de efectuar los pertinentes tratamientos de los productos del invernadero, hay que ventilarlo. De este modo, evitaremos que los fitosanitarios se fijen al plástico y lo degraden.
• Hay que tener especialmente cuidado, por su acción corrosiva sobre el plástico, con los productos que contengan azufre, cloro, flúor, bromo o yodo.
• Los depósitos de cal (si los hubiera) se deben eliminar utilizando agua a presión. Nunca use ácidos para esta misión.
• Si se producen fuertes rachas de viento es recomendable volver a tensar la estructura.